Acampada de EHGAM
Según el diccionario Collins, la palabra ‘gay’ tiene
cuatro acepciones: ‘alegre’, ‘vistoso’, ‘vivo’ y ‘homosexual’. Las
cuatro juntas describen perfectamente el ambiente vivido este pasado fin
de semana en el albergue de Uitzi, donde se ha desarrollado la
vigésimoprimera edición de ‘Transmarikabollo kanpaldia’, organizada por
EHGAM.
Como dice Mikel, llamar «kanpaldia» a este fin de semana de diversión
y formación no es del todo correcto, pues las tiendas de campaña ya son
solo un recuerdo de las primeras ediciones. Desde hace algunos años,
EHGAM ha optado por los albergues, más cómodos y adecuados para llevar a
cabo el programa de actividades previsto. Esta tarde toca conferencia
sobre monogamia y poligamia, presentación del libro ‘El amante
uruguayo’, una charla sobre el uso del euskara en las relaciones
afectivas, y la proyección de un documental rodado en Uganda, para luego
disponerse a cenar y encarar una noche de música y baile que se presume
larga. De hecho, el encargado del equipo de sonido está ajustándolo
desde la entreplanta para que dentro de unas horas este comedor, ya
despojado de mesas y sillas, se convierta en lo más parecido a una sala
de fiestas ibicenca.
Son cincuenta y dos personas las que han respondido a la llamada de
EHGAM a Uitzi, procedentes en su mayoría de Euskal Herria, más una
representación catalana. La fachada de la casona, que en su día fue
escuela del pueblo y se llama Orixenea, por haber estudiado aquí el
escritor Nicolas Ormaetxea ‘Orixe’, está decorada con ikurriñas y
senyeras, la bandera arco iris, símbolo del orgullo gay y lésbico, y
pancartas de EHGAM.
En la planta baja de la casa se expone una colección de fotografías y
textos sobre prácticas BDSM, propugnadas como sexualidad al margen del
patriarcado. Las han aportado los participantes catalanes que, según nos
cuenta Marc Garriga, llevan ya cuatro años acudiendo al «kanpaldi» de
EHGAM y «viendo cómo son nuestras realidades, qué podemos aprender unos
de otros, qué aportar».
En una mesa se muestran revistas y trípticos traidos de Catalunya,
junto a folletos de EHGAM sobre prevención de enfermedades de
transmisión sexual o dossieres sobre el ‘Plan de trabajo por la igualdad
y la no discriminación por orientación sexual e identidad de género’
del Gobierno de Lakua.
Precisamente, en materia de igualdad y no discriminación, cuestión en
la que EHGAM lleva trabajando 35 años, parece haber todavía mucho que
hacer, como indica Amaia González: «Si se aplican los recortes en
sanidad la situación de muchos afectados por VIH, especialmente
inmigrantes, empeorará radicalmente, pues es evidente que no pueden
pagar el tratamiento. Y en educación también corremos el peligro de ir
hacia atrás, por carencia de fondos para programas de concienciación»,
señala, al tiempo que denuncia que todavía son frecuentes en las aulas
las situaciones de discriminación de alumnos y alumnas que no responden
al patrón heterosexual.
Otro motivo de preocupación para EHGAM lo constituye el recurso
contra el matrimonio homosexual presentado ante el Tribunal
Constitucional español por el PP, recurso pendiente aún de resolverse.
«El derecho a casarnos –nos dice Xabier Balerdi– no puede ponerse en
cuestión a estas alturas, pero se pone. Otra cosa es lo que decida luego
cada pareja, qué fórmula de convivencia elija. Para mí, por ejemplo, el
matrimonio no es una cuestión prioritaria ahora mismo, pero el derecho
debe existir exactamente igual que para las parejas heterosexuales».
La tarde avanza, la siesta ha quedado atrás y Orixenea bulle de
actividad. La conferenciante sobre ‘Más allá de la monogamia’ repasa sus
apuntes, los encargados de la actividad ‘Sexo guay’ preparan la sala
donde se llevará a cabo y los amantes de la lectura ya escuchan a Julen
Zabala, que habla sobre la novela ‘El amante uruguayo’, acerca de la
vida de Enrique Amorim y su relación con Federico García Lorca.
Tenemos que marcharnos, pero no sin comprobar que Julen sabe cómo
atraer la atención del oyente desde las primeras palabras: «Lo que se
descubre en estas páginas es que Lorca tuvo una vida disipada. En otras
palabras, una promiscuidad absoluta. Allá donde iba, tenía dos amantes».
No hay comentarios:
Publicar un comentario