20100325- Los matrimonios homosexuales repuntan un 10% en Euskadi

El auge de las bodas de conveniencia provoca que una de cada tres bodas entre personas del mismo sexo cuente con un extranjero

.El 'boom' inicial de los matrimonios homosexuales parecía haber durado poco. A partir de 2007, el número de este tipo de enlaces se había estabilizado e incluso reducido en ciertas comunidades autónomas. Ese había sido el caso de Euskadi, pero el año pasado el número de matrimonios de este tipo volvió a repuntar. Según los últimos datos provisionales de Eustat, en los tres primeros trimestres del año se celebraron 92 matrimonios. Esto representa un incremento del 10,5% con respecto al mismo periodo de 2008. En contraste, las bodas civiles heterosexuales disminuyeron un 16%.

Entre los tres territorios históricos, en los últimos cinco años se han celebrado 528 de las más de 14.000 bodas entre personas del mismo sexo registradas en España. Desde la entrada en vigor de la ley a mediados de 2005 y hasta diciembre del mismo año, 69 parejas homosexuales contrajeron nupcias en el País Vasco. Al año siguiente, quizás espoleada por la novedad, la cifra se disparó hasta los 169 enlaces, si bien en 2007 el fenómeno se redujo cerca de un 48%.

Se da la cincunstancia que, hasta la fecha, en Álava prevalecen las uniones entre mujeres, mientras que en Gipuzkoa representan un 42% y en Vizcaya un 36%. En toda la comunidad autónoma, de hecho, los matrimonios entre hombres han aumentado en 2009 más que las bodas entre mujeres.

Los inmigrantes forman parte importante de las estadísticas. En los últimos dos años el 27% de los matrimonios homosexuales celebrados en Euskadi está compuesto por al menos un extranjero. ¿El motivo? «Las bodas por conveniencia. A nivel nacional llama la atención que en 2005 los enlaces civiles heterosexuales entre español y extranjero representaran el 10,7%, mientras que en los matrimonios homosexuales la cifra ascendía a más del doble, 22,5%», analiza Alfredo Rodríguez, profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Navarra.

«El incremento de las bodas gay en Euskadi podría deberse a que hemos importado a la sociedad vasca y española -que se ha caracterizado siempre por la aceptación y la acogida- un estilo de vida que no puede decirse que estuviese arraigado. Además, no creo que existan problemas con el colectivo homosexual. Son personas como cualquier otra y, por tanto, son bien recibidas», opina el sociólogo.

La letrada Cristina Odriozola coincide en que los extranjeros contribuyen en buena parte al incremento de enlaces entre personas del mismo sexo. «Es un problema que se planteó en los tribunales. Hay quienes vienen aquí a celebrar su matrimonio porque la legislación de su país no les permite casarse. Al final, se ha establecido que en el caso de que uno de los contrayentes sea español y el otro extranjero, mientras se cumplan los requisitos establecidos por España, el matrimonio tiene validez», explica la también profesora de Derecho Ecleseástico y Romano de la Universidad del País Vasco. Esta especie de 'turismo' resulta comprensible al saber que, de los 70 países que conforman Europa, sólo Holanda, Bélgica, España, Noruega y Suecia han legislado el matrimonio homosexual. También lo han hecho Canadá, Sudáfrica, Estados Unidos (en alguno de sus estados) y recientemente México (en la capital), que se ha convertido en el primer país latinoamericano en dar este paso.

Odriozola destaca que en este ámbito la legislación española es una de las más «progresistas y punteras», pero lamenta la actitud de algunos funcionarios. «La ley dice una cosa, pero hemos visto en la prensa casos de jueces y magistrados que se han negado a celebrar matrimonios homosexuales alegando objeción de conciencia. Debemos corregir este problema para que los cargos públicos conserven su derecho ideológico, siempre y cuando delegen esa función en alguien más».